domingo, 19 de enero de 2014

Stole My Heart: Capítulo 4



Capítulo 4

Narra Franco

-Cuatro Ojos tenemos que hablar sobre el trabajo de matemáticas.- Le dije ya que nos tocaba hacer juntos el trabajo.
-Si, emm...- Dijo mirando para otro lado pensativa. -¿Cómo querés arreglar?- Al fin habló.
-No te preocupes, lo hago yo el trabajo y luego pongo tu nombre. ¿Cuatro ojos era no?- Sonrío.
-Sabes muy bien que ese no es y no te voy a dejar hacer el trabajo vos solo, es de a dos.- Dijo remarcando el dos.
-No soy tonto, ya se que es de a dos.- Se escuchó un no parece salir de su boca. -Eh mira, si querés hacer el trabajo conmigo venís dentro de dos semanas a mi casa.- Estaba malhumorado, venía el colectivo, lo paré y me subí. Detrás mío subió ella y se paró a mi lado.
-Vos me estás cargando, en dos semanas hay que entregarlo. No se como todos dicen que sos el mejor de la clase porque parece que no sabes sumar.-
-Obvio que soy el mejor de la clase, soy yo ¿Entendes? Y sí se sumar, lo podemos hacer el domingo, antes del lunes que lo tenemos que entregar, ya pasaron dos semanas ¿No?- No dijo nada, se quedó bien calladita. Esa chica si lograba sacarme de lugar. El resto del viaje no nos dijimos nada y menos cuando nos bajamos.
  Llegué a casa y me preparé algo de comer, estaba solo. A la tarde me fui a entrenar al gimnasio que siempre iba. Cuando llegué saludé a mi instructor y a mi amigo, Luca. Siempre entrenamos juntos, así que nos hicimos amigos.
-¿Y qué tal la escuela hoy?- Me preguntó.
-Bien, lástima por una chica que me arruinó el día.-
-¿Qué pasó, no te dio bola? Es la única.-
-No, nunca estaría con esa.-
-Bueno, pero ¿Por qué no te la bancas?-
-Es insoportable, esa palabra la define bien.- Hizo una mueca y seguimos en lo nuestro.
  Llegué a casa y me duché. Después me tiré en la cama para ver si podía dormir una siesta pero fue imposible. En mi cabeza se repetía una y otra vez "¿Qué pasó, no te dio bola? Es la única". Era verdad, la única que no me dio bola. A cualquier chica que le hable se derretiría por decirle tan solo hola, y ella lo único que hacía era gritarme y desafiarme. Eso era lo que más me molestaba de ella. ¿Será porque nadie antes había estado en contra mío? Excepto mi padre, él nunca me defendía, siempre pensó diferente a mí. Igualmente yo nunca me defendí, es que le tengo algo de miedo.
-Hijo ¿Estás acá?-
-Si ma, ya voy- Me levanté y fui para la cocina. -¿Qué pasa?-
-Tu hermano tiene un noticia para vos.- No tenía ni idea de qué se trataba.
-El doctor dijo que... que estoy mejorando y que estoy respondiendo bien a los tratamientos.- Me sonrío. La felicidad vino hacia mí.
-¡Eso es genial, enano! Estoy muy feliz- Saber que mi hermanito se estaba mejorando era una gran noticia. Lo quería demasiado y me gustaría estar cien veces más yo en su lugar antes de que esté él, pero la vida no quiso que fuera así. Estuvimos todo el día jugando a la play hasta que se quedó dormido y yo lo seguí.
  Al día siguiente, entró el director al aula a presentarnos a nuestros dos nuevos compañeros. Había escuchado sobre eso, pero no le dí mucha importancia. Entraron al aula y a uno lo conocía, era...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario