viernes, 31 de enero de 2014

"No puedo conseguir cambiar ni corregir lo que me corre en las venas."Chau, No Te Va Gustar.

Casi Ángeles: La Isla de Eudamon.

Casi Ángeles: La Isla de Eudamon de Leandro Calderone es el primer libro de la primera temporada de la exitosa telenovela Casi Ángeles. En Argentina y en otras partes del mundo se transmitió por la pantalla chica esta novela creada por Cris Morena, la cual llegó a miles de adolescentes, y por supuesto, a mí.

En el 2007 comenzó a transmitirse en Argentina y desde el primer capítulo me enamoré. Casi Ángeles tuvo cuatro temporadas y al ser un verdadero éxito, Leandro Calderone, decidió escribir los libros de esta. Yo estaba súper emocionada porque podía tener en mis manos la historia que me acompañó en casi toda mi adolescencia y ahora, gracias al libro, toda mi vida. 

Es un libro bastante grande, ya que la novela tenía más de ciento treinta capítulos. Lo que más me gustó, a pesar de la historia, fue como estaba escrita. Te describe exactamente como uno lo vio en la tele y si viste la novela te imaginas exactamente la escena. La historia es interesante desde un principio, de como estos adolescentes terminan viviendo en el mismo lugar y siendo maltratados por aquel que les da un techo. Y además de identificarte con los problemas adolescentes, querés saber más sobre la vida de cada uno, sobre sus identidades. Te reís, te da intriga, suspenso, alegría, tristeza y demás. 

Casi Ángeles fue muy importante en mi vida porque además de ayudarme, pude entender y ver cosas de la vida que uno no se da cuenta, y te abre los ojos a lo que sucede a tu alrededor y te ayuda a comprender varias cosas que a nosotros, los adolescentes, nos importan. 

Detras de las nubes el cielo es siempre azul.

Sinopsis: 

Una noche de febrero de 1854 tres puntos luminosos dibujan en el cielo un triángulo per fecto: tres relojes idénticos han comenzado a funcionar al mismo tiempo, y uno de ellos está en el altillo de la mansión Inchausti. Y aunque parece una escena ocurrida por azar, muchos años después esos chispazos marcarán el destino de varios personajes. Tras la muerte de Amalia Inchausti, la mansión pasa a manos de su ambicioso sobrino, Bartolomé Bedoya Agüero, que crea la Fundación BB, en la que un grupo de niños y jóvenes son explotados por él y la mortífera Justina. Pero de la mano de Nicolás Bauer y de CieloMágico, que se enamoran apenas se conocen, y bajo la protección de algunos seres especiales, los sueños y las utopías podrán convertirse en realidad. La música es, sin lugar a dudas, el puente más importante para alcanzar la liberación, recuperar la dignidad y descubrir quiénes son realmente. Retomando la historia de la exitosa serie televisiva Casi Ángeles, Leandro Calderone ha escrito esta novela apasionante, que les permitirá a sus fieles seguidores rememorar los momentos más importantes vividos por sus queridos personajes y acceder a un secreto fundamental, nunca antes revelado, que el narrador ha escondido entre estas páginas.


jueves, 30 de enero de 2014

"Es cuestión de cerrar los ojos y soñar." - La chica de luces, Emilia Picazo.

Stole My Heart: Capítulo 9



Capítulo 9

Narra Franco



  Todo el fin de semana no pude dejar de pensar en Zen, en como me ayudó y, aunque no me soportaba, se preocupó por mí. También, no pude dejar de pensar en que la quería besar, esa necesidad extraña que no podía explicar que la había sentido desde el primer día que la vi, pero que ahora se intensificó aún más. 
  Cuando salí del colegio la vi besándose con Manuel y sentía que la furia recorría todo mi cuerpo, de pies a cabeza. Volteé para no seguir viéndolos. ¿Por qué tenía que estar con Manuel? ¿Justo él? El que me traicionó y no le importó nada nuestra amistad.
  Vi que Zen se estaba yendo y le grité para que me esperara, al llegar a su lado empezamos a caminar hacia la parada y me preguntó como estaba mi hermanito. Por suerte mañana volvía a casa. Subimos al colectivo y me extrañó que no se sentara en un asiento individual como acostumbraba a hacer, le pregunté si me podía sentar al lado de ella y ella asintió. Me dí cuenta que desde ese momento comenzamos a ser amigos, pero yo no quería ser su amigo quería ser algo más. ¿Por qué quería ser algo más? Solamente hablamos una vez. Entonces, cuando bajamos del colectivo, le dije que camináramos despacio y de la nada salió de mí boca "No te recomiendo que estés con Manuel." No se lo tuve que haber dicho, porque no quería dar explicaciones sobre aquello y cuando preguntó le dije que no importaba, pero sí importaba y me siguió preguntando y como el cobarde que soy me fui. Era un idiota porque no podía aceptar lo que pasó y nunca voy a poder hacerlo.
  Llegué a casa, abrí la puerta y me encontré con una gran sorpresa. No podía creerlo, mi hermanito ya estaba ahí de lo más bien. No pude evitar sonreír e ir a abrazarlo, saludé a mi madre y a mi padre; me ponía tan contento verlos a todos con una sonrisa en sus rostros.
  Luego de almorzar, estaba en mi habitación escuchando música, pero esta se paró cuando me llego un mensaje: "Le llegas a contar lo que pasó entre nosotros y estas muerto." No decía de quien era ni sabía de que hablaba. Le respondí preguntando quien era y un minutos después me llegó otro: "¿No te diste cuenta todavía? Pensé que eras más inteligente. Soy Manuel." ¿Y ahora qué le pasaba? ¿No quería que le cuente a Zen lo que ocurrió entre nosotros porque ella lo iba a dejar de querer? Si se entera lo más probable es que lo deje de querer. Aparte si se lo cuento ¿Qué me podría llegar a hacer? Nada, no creo que sea capaz de matarme ¿O si? Dejé de pensar en él y en sus malditos mensajes. Agarré mi guitarra, empecé a jugar con mis dedos y lo que escuchaba sonaba bien. De inmediato lo anoté en mi cuaderno, para no olvidarme, y empecé a escribir la letra:

Bajo las luces esta noche

te diste vuelta y me robaste el corazón.
Una sola mirada y vi tu cara
y me enamoré.
Tómate un minuto y roba mi corazón esta noche
Una sola mirada, sí
estoy esperando a una chica como vos...

-¿Qué haces?- Me interrumpió mi hermano.

-Nada, solo compongo.-
-¿Puedo leer?-
-Claro enano, toma.- Le entregué el cuaderno.
-¿Y... quien es la chica?-
-¿Qué chica?-
-Ya estoy grande, podes contarme las cosas. Quien es la chica que te enamoró, por la que estás escribiendo la canción.- Lo pensé un rato. ¿En verdad estaba enamorado? Recién la conocía y no sabía nada sobre ella, era imposible.
-Se llama Zendaya, pero no estoy enamorado. Solo nos llevamos bien, como amigos nada más.-
-Si, claro.- Dijo con sarcasmo. Lo agarré con las dos manos y comencé a hacerle cosquillas.
-Ya basta, en serio. Odio las cosquillas.- Paré. -Quiero conocerla.-
-¿A quién?-
-A Zendaya.-
-No te preocupes, falta muy poco para que la conozcas.-

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El pedacito de letra es de la canción Stole My Heart de One Direction, traducida. Por esa canción cree el nombre de la novela y me inspiró, de alguna forma, en escribirla. 

  

martes, 28 de enero de 2014

Eternidad

Eternidad de Alyson Noël es el primer libro de la saga Inmortales. Me lo presto una compañera de mi antiguo colegio. Al principio no lo veía con muy buena pinta, pero me llamaba la atención el nombre y la sinopsis. 

Cuando comencé a leerlo me atrapó desde el principio, eso significaba que Noël es una buena escritora, pero pensé que era otra historia de vampiros y en verdad deseaba que no sea de vampiros (perdón si ofendo a alguien que les guste los vampiros) y cuando llego al final del libro me sorprendí: primero porque no era de vampiros y segundo porque no hubiera imaginado que terminaría así. 

Me sorprendí, así que ame el libro. Pero también lo amé por el misterio que siempre está presente, por la intriga que uno tiene cuando lo va leyendo, por los momentos de tensión en los que no podes parar de leer porque queres saber como termina, y por el final. 

Amo las historias de amor y esta era una de ellas, pero con un toque diferente: fantástico y mágico.

Cuando terminé de leerlo me enloquecí y busque todo acerca de él, descubrí que era el primero de una saga e inmediatamente quería leer el siguiente, porque en verdad me había atrapado.

Sinopsis:

Desde que un trágico accidente acabó con las vidas de sus padres y su hermana, Ever puede oír los pensamientos de todos los que están a su alrededor, ver su «aura» (el halo de luz que les rodea) y descubrir su pasado con sencillamente tocarles la piel. Además, Ever se comunica con el espíritu de su hermana, que la visita casi todas las noches en casa de su tía. Tras unos meses de convalecencia, Ever empieza el curso en una nueva escuela, donde pronto se gana la fama de «chica rara». Solo tiene dos amigos, los también excéntricos Haven y Miles. Pero todo cambia cuando un chico nuevo se incorpora a su clase: se llama Damen y es atractivo y exótico, por lo que todas las chicas, Haven incluida, quieren ganarse su interés. Ever, como siempre, se mantiene al margen, pero, para su sorpresa, cuando Damen la mira por primera vez a los ojos, le trasmite una sensación especial, indescriptible, casi mágica. Damen no tiene aura y además, cuando se acerca a ella, interrumpe el corriente de pensamientos que la atormentan.Con el paso de los días, y a pesar de negárselo a sus amigos y a sí misma, Ever no puede evitar enamorarse de él… Pero ¿quién es Damen en realidad?

El pacto de paz entre la vida y la eternidad se llama Muerte.




"No debes jugar con los sentimientos de los demás solo porque estas inseguro de los tuyos."

Stole My Heart: Capítulo 8



Capítulo 8


Narra Zendaya

  Era lunes, estaba acostada en la cama y no tenía ganas de levantarme para ir al colegio. Le pregunté a mi madre si podía faltar pero rechazó mi propuesta así que me levanté, hice mi rutina, y fui al colegio. Cuando llegué Ele me saludó con un abrazo.
-No hablamos en todo el fin de semana ¿Cómo estuvo la fiesta?- Tardé en responder, todavía estaba dentro del sueño que estaba soñando antes de despertarme, aquel en donde los extraterrestres eran buenos y nos ayudaban.
-Estuvo bien.- Solo eso pude contestar.
-Sonreís así y me decís que estuvo bien, dale contame. ¿Qué pasó?- Sabía que tenía algo para contar porque me conocía de pies a cabeza pero no le iba a decir: me hice amiga de Franco y desde ese día no me lo puedo sacar de la cabeza. No se lo iba a decir ahí en el colegio, pero cuando iba a hablar veo que Franco se acerca.
-Hola Zen. ¿Todo bien?- Me dijo con una sonrisa.
-Si, todo bien. ¿Vos?-
-Si, hablamos luego.- Contestó y se fue con su grupo de amigos. Yo no dejaba de sonreír y me maldije por no haberle preguntado por el hermanito.
-¿Eso qué fue?- Me preguntó Ele mirándome con los ojos abiertos.
-Nada.- Me limité a decir. Eleanor iba a hablar pero Luca la interrumpió.
-Hola chicas. ¿Qué cuentan?-
-De que esta chica...- Contestó Ele señalándome con su dedo índice. -no me quiere contar que paso en la fiesta y por que cuando Franco llegó la saludo y le dijo "Zen".- Me miró, Luca hizo lo mismo.
-¿Perdón? ¿Vos y Franco saludándose?- Preguntó Luca.
-Ya, no pasó nada. Tenemos que subir al aula.-
-¿Por qué te haces la misteriosa? Odio cuando te haces la misteriosa.- Dijo Ele exaltada.
-Si bajas la voz te cuento. Estábam...-
-Mira quien apareció- Dijo Manu algo enojado.
-¿Qué te pasa?- Le preguntó mi amiga.
-¿Tú amiguita no te contó?- Ella me miró, yo no entendía de que hablaba. -Me dejaste plantado en la pista de baile, nunca volviste. ¿En dónde te metiste?- Cierto, me había olvidado de eso. No sabía que decirle.
-Yo... yo me sentía mal y llamé a mi papá para que venga a buscarme y me fui.- Dije rápido, por suerte él se calmo.
-Me hubieras avisado por lo menos. Te estuve buscando por todos lados. ¿Ahora te sentís mejor?- 
-Si- Sonreí falsamente.
-Perdón por gritarte, voy al aula.-
-¿Y?- Me preguntó Ele.
-¿Y qué?-
-Contame, porque yo no te creo que te sentías mal y te fuiste.-
-Subimos al aula y te cuento a vos y a Luca.- Subimos al aula, me senté con Ele y Luca se sentó atrás de nosotras. -Bueno, estaba bailando con Manu, él me quería besar y yo no, entonces le metí la excusa de que tenía que ir al baño. Me perdí y me encuentro con Franco que estaba llorando y le pregunté que pasaba y hablamos de varias cosas y bailamos un poco y me fui.- Ambos me miraban como si hubieran descubierto América. -Eso es todo.-
-¡Vos me estás cargando!- Gritó Ele.
-Espósito y compañía se pueden callar, estamos en clases no en una cancha.- Nos retó la profesora, las dos nos miramos.
-¿Por qué tenes que gritar?- Le pregunté bajito.
-Perdón, me salió de adentro.-

  El resto de la mañana lo único interesante que pasó fue que Manu no se despegó de mi ni un segundo, Ele y Fer no dejaron de mirarse, Nicole no dejaba de mirar a Harry y yo crucé alguna que otra mirada con Franco. Estábamos saliendo del colegio y Manu me frenó agarrándome del brazo.
-¿Te acompaño?- Me preguntó.
-¿Hasta dónde?-
-Hasta tu casa.-
-¿Vos estás loco? Yo voy a estar bien, aparte Franco va para el mismo lado que yo.- Se acercó más a mí.
-No me importa Franco, me importas vos. Y por eso no quiero que te pase nada.- Manu se acercaba cada vez más a mí y yo me alejaba hasta que choqué con una pared y me besó. Lo empujé para atrás.
-¿Qué haces?- Dije enojada.
-Lo que me quedó pendiente el sábado. ¿No te gusto no?- Puso cara de perrito mojado.
-No, es que recién nos conocemos y no se nada de vos. Me tengo que ir, chau.- Empecé a caminar rápido para que no me alcanzara.
-Zen, espérame.- Al principio pensé que era Manu pero la voz no era la misma. Dí media vuelta y era Fran, le sonreí.
-Hola- Me dijo cuando me alcanzó.
-Hola. Antes me olvidé de preguntarte sobre tu hermanito. ¿Cómo está?-
-Mucho mejor, mañana vuelve a casa por suerte. Gracias.- Sonrío, su sonrisa era hermosa.
-De nada.- Llegó el colectivo, subimos y me fui a sentar en uno de los dobles asientos que había vacíos. Fran se quedó parado en vez de sentarse al lado mío.
-¿Puedo?- Me preguntó señalando el asiento.
-Si obvio. ¿Por qué no vas a poder?- Se sentó.
-¿Y a qué colegio ibas?- 
-Al que está a dos cuadras del nuestro.-
-A... ¿y por qué te cambiaste?-
-Por la cuota. ¿Vos hace mucho qué estás en el colegio?-
-No, el año pasado entré, pero ya había ido antes.-
-¿Y a dónde ibas?-
-No lo vas a conocer.-
-No importa ¿No puedo saber el nombre? Pregunté.-
-Es que antes vivía en Londres, cada dos años, por el trabajo de mi papá vamos de un país a otro. Por suerte hasta que termine el colegio no nos vamos a mudar más.-
-¿Debe ser feo ir de un lado a otro no?-
-Sí.- Bajamos del colectivo. -Caminemos lento.- Dijo.
-¿Por qué?-
-Porque en aquella esquina nos vamos a separar y es divertido estar con vos.- Me había sonrojado un poco, solo deseaba que no se de cuenta. -No te recomiendo que estés con Manuel.- Me sorprendió ese comentario.
-¿Qué?-
-Vi que te besabas con él.-
-No no, él me besó yo no hice nada. Aparte no me gusta.-
-Mejor así.-
-¿Por qué?-
-No importa.-
-Sí importa.-
-Llegamos a la esquina, que lastima. Bueno nos vemos mañana ¿Dale? Besos.- Me dio un dulce beso en la mejilla y se fue dejándome con la palabra en la boca. ¿Por qué no quería que esté con Manu? 
  

jueves, 23 de enero de 2014

"Nos prometieron que los sueños podrían volverse realidad. Pero se les olvidó mencionar que las pesadillas también son sueños." -Oscar Wilde.

Stole My Heart: Capítulo 7




Capítulo 7

Narra Franco

¿Por qué, por qué haces esto? Fue lo que le pregunté a Zendaya, se quedó en silencio unos segundos. 
-No sé, me gusta ayudar a la gente, aunque no te banco te vi mal y te quise ayudar.-
-¿Por qué no me bancas? A mí todos me quieren.-
-Bue... una razón es esa te crees mucho para lo que sos. Y no será porque desde el primer día de clases me decís cuatro ojos y andamos "discutiendo".- Viéndolo de ese punto, ella tenía razón. 
-¿Por qué me molestas? Yo nunca te hice nada.- Me preguntó.
-Ya se, pero no se me gusta...-
-¿Llamar la atención?- Me interrumpió. La miré mal.
-No exactamente.- Nos callamos por varios minutos.
-¿Por qué no empezamos todo de nuevo? Digo, para llevarnos mejor. ¿Qué te parece?- Le pregunté.
-Mmm... Está bien, empecemos todo de vuelta- Dijo sonriendo.
-Hola, soy Franco. ¿Sos nueva no?-
-Sí, soy nueva. Soy Zendaya, mucho gusto.- Nos estrechamos las manos.
-¿Cuántos años tenes?-
-Quince. ¿Vos también?-
-No, tengo dieciséis. Un año no fui al colegio por mi hermanito. ¿De qué signo sos?-
-Cáncer, ¿Vos?-
-Virgo. ¿Y si jugamos al juego de las preguntas? Una vos y otra yo.-
-Buena idea, empeza.-
-Está bien. ¿Película preferida?-
-Diario de una Pasión. ¿La tuya?-
-La vi, es linda. American Pie. Te toca.-
-¿Canción?-
-No tengo, hay muchas que me gustan. ¿Vos tenes?-
-Si, No Necesito Nada de No Te Va Gustar.-
-Conozco la banda pero no la canción.-
-Es linda.-
-Tenes novio?- Me miró de reojo.
-No, no tengo. ¿Vos tenes? Novia, no. Igualmente podes ser gay.-
-¿Te parezco gay?-
-Y casi todos los chicos con tus facetas en el rostro son gays.- Me reí.
-No, no soy gay y no tengo novia. Te toca.-
-No, ya te pregunté sis sos gay. Te toca a vos.-
-No me preguntaste nada.-
-Fue una casi pregunta. Vos la contestaste, no se, fíjate.-
-No me voy a fijar nada porque tengo razón, siempre la tengo.-
-Ya te agrandaste. Hace una pregunta queres.-
-Bueno, esta bien. ¿Tuviste novios?-
-Uno, estuvimos medio año saliendo.-
-¿Te rompió el corazón?-
-No.-
-Vos se lo rompiste a él. ¿Lo engañaste?- Si es así es una idiota, pensé.
-No, nunca le haría eso a una persona, está mal y no podría vivir con la culpa.- Retiro lo dicho.
-Y entonces... ¿Por qué cortaron?-
-Él me ahogaba y me dejó de gustar, solo le corté. ¿Vos tuviste novias? ¿Cuantas?-
-Que sea serio tuve una, después eran solo salidas con las demás.-
-Mujeriego.-
-Yo creo que lo llamaría ganador.-
-¿Vos le cortaste o ella a vos?-
-Me engaño con un tipo mucho mas grande que ella.-
-Es feo que te hagan eso ¿No?-
-No te das una idea, es horrible.-
-Bueno, sigamos con las preguntas.-
-¿Tú primer beso cuando lo diste?-
-Hace dos años. ¿Vos?-
-En sexto.- Tomé un poco de Vodka y luego lo apunté hacia ella para ver si quería.
-No, gracias. No quiero.- La miré a los ojos, tenían como algo oculto, como que querían decir algo pero no lograba descifrar lo que era. No podía dejar de sonreír, no se que me pasaba; seguro estaba borracho.
-¿Bailas?- Le pregunté estirando mi mano hacia ella. La música llegaba hasta allí. Me sonrío y me tomó de la mano, nos levantamos, nos paramos uno enfrente del otro; no nos dejamos de ver a los ojos ni un segundo. La acerqué más a mí rodeando con mis manos su cintura, ella rodeó las suyas detrás de mi cuello y nos empezamos a mover al compás de la música. Era un lento, no lograba darme cuenta cual era ya que solo pensaba en ella. Intenté acercarme aún más, pero en ese momento sonó su celular.
-Debo contestar.- Se alejó de mí, tomó su celular y atendió. La seguía mirando, hasta que volteó a verme y corrí mi mirada hacia otro lado. Termino de hablar y se acercó.
-Tengo que irme. Tu hermanito va a estar bien, no te preocupes. Chau.- Dijo, besó mi mejilla y comenzó a caminar.
-Zen, espera.-
-¿Qué?-
-Gracias.- Le sonreí.
-No de nada.- Sonrío y se fue dejándome solo en esa habitación. 



miércoles, 22 de enero de 2014

"A veces en la vida las cosas cambian en el espacio de un simple grito, antes de que las personas puedan acostumbrarse a ellas." -El Alquimista, Paulo Coelho.

Romeo y Julieta

Romeo y Julieta de, como todos sabemos, William Shakespeare es la famosa historia de amor trágica que todos conocemos. 
Es la primera obra de teatro que decidí leer por mi cuenta y no por obligación de la escuela. Odio leer obras de teatro porque no comprendo del todo, me pierdo con los monólogos, me aburre que no tenga narración y casi todas (por lo menos las que me dieron en el colegio) son aburridas, así que esta era un reto.

¿Cómo evaluar esta obra si no me gusta leer obras de teatro? Es complicado, no me gusta el libro en sí porque al ser todo diálogo y cada personaje hace monólogos larguísimos, en los que me pierdo, no me gustó. Por otro lado, la historia en sí, si me gustó. Un amorío imposible, en el que todos estaban en contra, pero a ellos no les importó.

Cuando empecé a leer el libro no tenía ni la más mínima idea de todo lo que sucedía en el medio de la historia. Solo sabía que las familias estaban peleadas, ellos se enamoraron y murieron por amor. Pero cuando comencé a leerlo descubrí muchas cosas, sobre que ellos eran muy jóvenes, los obligaban a casarse con otras personas, sobre como Romeo no se enteró del plan de Julieta, entre otras cosas. Es por eso que es mejor leer las cosas o verlas por uno mismo que escucharlas de otro, porque así te enteras de muchas cosas, verdaderas, que antes no sabías.

Creo que si hubiera leído la historia sin saber como terminaba, me habría sorprendido. Porque cuando uno lee sin saber el final, a mi me hubiera gustado que terminaran juntos y vivos, pero terminaron juntos y muertos y eso es, en mi opinión, lo que hizo famosa la obra. No todo final es como uno desea y no todo en la vida es como uno lo desea. Pero la incomunicación y la muerte de ambos hizo que le ponga la frutilla a la torta.

Siempre me gustó esta historia, y fue la obra de teatro más entretenida que leí. Lo que no me gusta son las demás historias que son iguales o se basaron en Romeo y Julieta. 

Su amor era más fuerte que todos y todo lo demás.

Sinopsis:

Cuenta la historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de la oposición de sus familias, rivales entre sí, deciden casarse de forma clandestina y vivir juntos; sin embargo, la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen al suicidio de los dos amantes. Esta relación entre sus protagonistas los ha convertido en el arquetipo de los llamados star-crossed lovers. La muerte de ambos, sin embargo, supone la reconciliación de las dos familias.

martes, 21 de enero de 2014

Stole My Heart: Capítulo 6



Capítulo 6

Narra Zendaya

  Estaba llegando a la casa del cumpleañero, que al parecer se llamaba Gabo. Entré y me sorprendí al ver que la casa era demasiado grande, literalmente. No saludé a nadie porque no conocía a nadie, hasta que me encontré con Gabo, lo felicité y le entregué su regalo. Era un perfume, lo más sencillo de regalarle a alguien que no conoces. Seguí caminando para seguir sorprendiéndome y la música estaba cada vez más fuerte mientras me acercaba a la pista de baile. El lugar estaba muy bien decorado, ese chico si tenía plata. En un momento vi a Franco y no pude evitar sonreír al ver que estaba bastante guapo, como decía Ele. Se veía muy bien... ¿Por qué digo estas cosas? Si yo lo odio.
-¡Hola!- Me sobresalté, me di vuelta y era Manu.
-Ay, me asustaste.-
-Perdón.- Me miró de arriba a bajo. -Estás hermosa.-
-Gracias, vos también.- Me sonrío.
-¿Bailamos?- Me preguntó. No tenía muchas ganas de bailar, pero no le iba a decir que no. Me agarró la mano y fuimos a la pista de baile. Estaban pasando cuarteto y empezamos a bailar, bailaba bastante bien como para ser un chico. De repente cambiaron la música y pusieron un lento ¿Por qué tenían qué poner un lento? Ya no ponen más lentos en las fiestas. ¿Por qué en esta si? Manu me agarró de la cintura y me acercó más a él. Apoyé mis brazos en sus hombros haciendo que mis manos quedaran detrás de su cuello y nos empezamos a mover de un lado hacia el otro lentamente. Comenzó a mirar mis ojos fijamente y su rostro se acercaba más al mío. No quería besarlo, no me gustaba y tampoco lo conocía. Entonces pensé en una excusa.
-Tengo que ir al baño, es urgente.-
-Podes ir después al baño ¿No te parece?- No, no me parece, pensé.
-Es que es cosa de chicas- Dije nerviosa, no sabía mentir.
-Bueno, te espero acá.-
-¿Dónde queda el baño?- Le pregunté, no escuché ni una sola palabra de lo que dijo, solo fui hacia donde señalo. Empecé a caminar pero me perdí, esa casa era un laberinto. Pasé por una habitación y en una punta veo a un chico, lo vi mejor y era Franco. ¿Qué hacía Franco ahí? Al lado de él había una botella de vodka y él llorando. ¿Qué demonios hacía Franco llorando? No podía ser. Lo miré otra vez, me dio lastima. ¿Qué tenía qué hacer, entrar y preguntarle qué pasaba o irme y dejarlo allí y qué se arregle solo? Opté por la segunda, pero la intriga me ganaba y quería ayudarlo, así que elegí la primera. Caminé hacia él y me senté a su lado sin decir nada. Me miró con sus ojos sollozos y, eran hermosos aunque estén llenos de agua, volvió a mirar al piso. No sabía que hacer.
-¿Por qué lloras?- Le pregunté.
-No estoy llorando- 
-Claro, solo tus ojos sudan.- Hizo una mini sonrisa.
-Andate, quiero estar solo.-
-No me parece. Cada vez que alguien está mal siempre necesita alguien que los abrace y que le diga que todo va a estar bien, aunque lo niegue. Va, eso es lo que me pasa a mí. Pero si querés que me vaya, me voy.- Me estaba poniendo de pie para irme.
-No te vayas.- Me miró y luego me abrazó. Me sorprendí por el abrazo, nunca pensé que haría eso. Hice lo mismo, lo abracé y un cosquilleo recorrió mi cuerpo.
-Ahora tenes que decir que todo va a estar bien.- Su voz fue ronca.
-Todo va a estar bien.- Dije y lo abracé más fuerte. Se alejó de mí y se volvió a sentar.
-¿Querés contarme por qué lloras?- Me senté nuevamente a su lado.
-Mi hermanito tiene cáncer, Leucemia y ahora está internado en el hospital. Ayer empezó a tener mucha fiebre y hace un rato le empezó a salir sangre de la nariz y no paraba, perdió la conciencia. ¿Por qué le tiene qué pasar a él y no a mí? Se estaba recuperando.- Empezó a llorar nuevamente, verlo así me hacía sentir mal a mí, no entiendo el porque.
-¿Y qué haces acá? Él te necesita, tenes que estar con él.- ¿Por qué dije eso? Le pude haber dicho: no te preocupes va a salir de esta. Soné re insensible.
-Ya sé que tengo que estar con él, pero mi papá me lo prohíbe. No quiere que esté allá.-
-¿Y por qué no vas igual? Qué importa lo que dice tu papá, si vos querés estar con él vas y punto final.- Y otra vez soné insensible, un aplauso para mí.
-Es que no puedo, no puedo contradecirlo. Nunca pude y creo que nunca voy a poder hacerlo.- Antes de decir algo mejor lo pienso.
-Está bien. Mira, tu hermanito se va a poner bien, seguro es fuerte y va a poder salir de esta.-
-¿Cómo sabes?-
-Lo sé porque lo siento. Aparte si vos lo apoyas desde acá o desde cualquier lado él va a tener fuerza todavía. Pero demostrale que sos fuerte, así te imita.-
-Tenes razón. Gracias.-
-¿Por qué el gracias?-
-Por hacerme entender que todavía se puede.- Le dediqué una sonrisa, él hizo lo mismo y sentí que me derretía en ese momento.
-¿Por qué, por qué haces esto?- Me preguntó. 
"Los abrazos en los momentos  tristes te liberan, sentís que le importas a la otra persona, que tenes a alguien en quien apoyarte. Simplemente te dan paz en un momento de guerra." -Agustina Boria

Elegida

Elegida de P. C. Cast y Kristin Cast es el tercer libro de la saga La casa de la noche. Comencé a leerlo sin saber que era una saga y sin saber que era el tercer libro. Pero no me dí cuenta, ya que, a mi parecer no se necesita leer los demás libros para entender este. Excepto que quieras saber que cosas sucedieron en los dos primeros libros. 

Se me complica hacer una reseña sobre este: no me acuerdo mucho sobre toda la historia y no me gustó demasiado. Las escritoras escriben muy bien, eso sí me gusto, pero la historia no. 

Es un libro en donde hay vampiros, y yo no me llevo muy bien con ellos. No soy una fanática loca que muere por cada cosa de vampiro que sale, simplemente no me gustan. Pero este libro lo leí antes de que salga toda esa locura sobre los chupasangre. Debo admitir que la historia atrapa y hay varias escenas en las que sentís el suspendo e intriga; son las mejores partes del libro. En cambio, el resto, sobre las historias de amor y demás no me convenció mucho. Y lo que hizo que no me gustara demasiado este libro fue el final. Obvio que tiene un final abierto porque la saga tiene diez libro y creo que se van a publicar dos más. No llegó a darme la intriga necesaria como para leer los anteriores libros ni los siguientes, así que nunca sabré como terminará esta historia.

Muchos no estarán de acuerdo conmigo, otros poray si. Pero les puedo asegurar que es un gran libro para los amantes de los vampiros, romance y terror.

Sinopsis:

Aquellos que parecían ser amigos de la vampira iniciada Zoey Redbird resultan ser enemigos. Y, por extraño que parezca, los enemigos acérrimos se transforman en inesperados aliados. Su mejor amiga, Stevie Rae, es una no muerta que lucha por aferrarse a su humanidad. Zoey no tiene ni idea de cómo ayudarla, pero sí sabe que t odo lo que descubran juntas debe permanecer en secreto, porque las paredes de la escuela parecen tener oídos. Además, Zoey tiene que aclarar sus sentimientos, porque casi sin darse cuenta ya tiene tres novios... Pero entonces comienzan a aparecer vampiros muertos. Verdaderamente muertos. Y mientras ella y sus amigos desvelan el misterio, las cosas en la Casa de la Noche se ponen realmente feas…

lunes, 20 de enero de 2014

Stole My Heart: Capítulo 5



Capítulo 5


Narra Zendaya

  Luca y Eleanor ¡No lo podía creer! Mis dos mejores amigos acá, en mi nuevo colegio. Los miraba parados, allá delante y no podía ir y abrazarlos, parecía un sueño. Hacía bastante que no estábamos los tres juntos en un mismo colegio, ahora todo iba a ser como antes.
  La ansiedad me carcomía y la hora no se pasaba más. Quería preguntarles que demonios hacían acá. Ellos se habían sentado juntos atrás de todo, bien lejos mío.
-¿Los conoces?- Me preguntó Manu. Ese día me pidió que por favor me sentara con él, pero no le contesté porque justo tocó el timbre y fui directo hacia mis mejores amigos.
-¿Qué hacen acá?-
-¿Ni un hola de tu parte?- Dijo Luca. Les dije Hola, les dí un abrazó y les pedí que me cuenten.
-Era sorpresa para vos. Nuestras madres nos dejaron cambiarnos. Entramos más tarde porque unos papeles se retrasaron o algo así.- Me contestó Eleanor. Salimos al recreo y vi acercarse a Franco ¿Ahora qué quería?
-¡Hola! ¿Qué haces acá?- Le preguntó Franco a Luca.
-¿Se conocen?- Pregunté.
-Si, del gimnasio.- Me respondió Luca y luego le devolvió el saludo a Franco, quien apartó a Luca de nosotras. Pero pude escuchar lo que decían.
-¿Ella es tú mejor amiga de la que siempre hablas?
-Si, es ella. ¿Por qué?-
-Porque esa es exactamente la chica que no me banco.-
-¿Ella es? Es la persona más buena.-
-Será la más buena pero también la más insoportable.- Luca le dio una palmada en el hombro y volvió con nosotras.
-Es guapo ¿No crees?- Preguntó Ele, la miré con mi peor cara desaprobando lo que dijo.
-Así que no me banca, mira vos. Yo tampoco a él, es odioso. La verdad que no entiendo como podes ser amigo de él y que vos...-Dije señalando a Ele. -Digas que es guapo- Ambos se me quedaron mirando. -¿Qué? Es la verdad.-
  Casi al terminar el recreo, nos interrumpió un chico, al parecer era de mi clase. Todavía no reconocía a todos mis compañeros, menos sabía los nombres. 
-Chicos, los invito a mi fiesta de cumpleaños este sábado, espero que vayan.- Nos entregó una tarjeta, a cada uno, con todos los datos de la fiesta y se fue.
-No puedo ir, tengo el cumpleaños de mi hermana.- Dijo Luca.
-Yo tampoco, le prometí a mamá que me quedaría en casa.-
-¿Me van a dejar sola?- Los dos asintieron con la cabeza. -Bueno, vamos con las chicas, así se las presento.- Les presenté a cada una y Nicole no podía dejar de mirar a Luca. Eso me ponía un poco celosa, no es que él me guste solo que soy celosa de mis amigos.
-¿Ustedes van a ir al cumpleaños?- Les pregunté.
-Nosotras tres no podemos, ellas si.-
-Yo también.- Dijo Manu que acababa de llegar a la ronda. Le sonreí, tocó el timbre y entramos al aula. Me dí cuenta que Ele no me seguía, alguien la había detenido en la puerta. Voy hacia donde ella estaba.
-¿Eleanor no?- Preguntó Fernando, creo que se llamaba así.
-Sí.- 
-Soy Fer, un gusto conocerte.- ¡Sí! Era Fernando.
-Igualmente- Le contestó Ele con una sonrisita tonta. Cuando llegó la profesora, Fernando le guiñó un ojo a Ele y se fue a sentar. Los cachetes de Ele ardieron.


Narra Franco

  Estábamos en clases de Historia, una clase muy lenta y aburrida para Fer y yo, entonces no le prestamos ni un segundo de atención. Él me hablaba sobre una chica nueva, que era hermosa, tenía una linda sonrisa y el resto no lo escuché.
-¿De quien hablas? ¿De cuatro ojos?- Le pregunté para volver mi atención hacia él.
-¿Qué? No, de la chica nueva, Eleanor. ¿Me estás prestando atención o estás pensando en Zendaya?-
-No, mira si voy a estar pensando en ella, te pregunté porque no sabía de quien hablabas.- Me justifiqué pero al parecer no me creyó. Y la verdad es que sí, estaba pensando en ella, en todo lo que Luca me contaba, parecía la chica casi perfecta. Pero yo no le veía absolutamente nada de perfecto, solo era una loca gritona. 
                                     *   *   *

  Al fin era sábado, la semana, por suerte, se pasó rápido. Eran las ocho de la noche y a las nueve tenía el cumpleaños de Gabo. Me bañe, me vestí y salí para la casa del cumpleañero. Cuando llegué me atendió la madre, y como buen chico educado que soy, la saludé y pedí permiso para entrar. El lugar estaba todo decorado: habían luces por todos lados, pantallas, música bien alta y hasta una barra de tragos. Lo busqué a Gabo y le entregué mi regalo, una remera. Empecé a saludar a cada persona que conocía y unos segundos después vi entrar a Zendaya. Me sorprendí al verla, estaba... linda. Llevaba el pelo suelto, con algunas ondas en él; su vestimenta era linda, le marcaba sus curvas. Salí de mis pensamientos ya que mi celular sonó, era mi padre. Me preocupé porque no era de llamarme.
-Hola ¿Pasó algo?-
-Si...- Lo que escuché luego me aturdía en mi cabeza más que la música que sonaba.
-No puede ser.- Le respondí. -Ya voy para allá.-
-No, no vengas.-
-¿Cómo no voy a ir? Me necesita.-
-No haces falta acá.-
-¿Papá me estás cargando? Tengo que ir.- Dije elevando un poco la voz.
-Dije que no. Te vas a quedar en el cumpleaños hasta que termine y yo te vaya a buscar. No hagas nada fuera de lugar ¿Me entendiste? Chau.- Se oía enojado.
-Pero pa...- Luego se escuchó un pi...pi...pi...
  No me podía estar pasando esto ahora, solo quería salir de ese lugar pero no podía. Entonces busqué un sitio en esa gran casa para refugiarme.
"Fúmate la vida, inhala la felicidad y exhala las tristezas."

domingo, 19 de enero de 2014

Stole My Heart: Capítulo 4



Capítulo 4

Narra Franco

-Cuatro Ojos tenemos que hablar sobre el trabajo de matemáticas.- Le dije ya que nos tocaba hacer juntos el trabajo.
-Si, emm...- Dijo mirando para otro lado pensativa. -¿Cómo querés arreglar?- Al fin habló.
-No te preocupes, lo hago yo el trabajo y luego pongo tu nombre. ¿Cuatro ojos era no?- Sonrío.
-Sabes muy bien que ese no es y no te voy a dejar hacer el trabajo vos solo, es de a dos.- Dijo remarcando el dos.
-No soy tonto, ya se que es de a dos.- Se escuchó un no parece salir de su boca. -Eh mira, si querés hacer el trabajo conmigo venís dentro de dos semanas a mi casa.- Estaba malhumorado, venía el colectivo, lo paré y me subí. Detrás mío subió ella y se paró a mi lado.
-Vos me estás cargando, en dos semanas hay que entregarlo. No se como todos dicen que sos el mejor de la clase porque parece que no sabes sumar.-
-Obvio que soy el mejor de la clase, soy yo ¿Entendes? Y sí se sumar, lo podemos hacer el domingo, antes del lunes que lo tenemos que entregar, ya pasaron dos semanas ¿No?- No dijo nada, se quedó bien calladita. Esa chica si lograba sacarme de lugar. El resto del viaje no nos dijimos nada y menos cuando nos bajamos.
  Llegué a casa y me preparé algo de comer, estaba solo. A la tarde me fui a entrenar al gimnasio que siempre iba. Cuando llegué saludé a mi instructor y a mi amigo, Luca. Siempre entrenamos juntos, así que nos hicimos amigos.
-¿Y qué tal la escuela hoy?- Me preguntó.
-Bien, lástima por una chica que me arruinó el día.-
-¿Qué pasó, no te dio bola? Es la única.-
-No, nunca estaría con esa.-
-Bueno, pero ¿Por qué no te la bancas?-
-Es insoportable, esa palabra la define bien.- Hizo una mueca y seguimos en lo nuestro.
  Llegué a casa y me duché. Después me tiré en la cama para ver si podía dormir una siesta pero fue imposible. En mi cabeza se repetía una y otra vez "¿Qué pasó, no te dio bola? Es la única". Era verdad, la única que no me dio bola. A cualquier chica que le hable se derretiría por decirle tan solo hola, y ella lo único que hacía era gritarme y desafiarme. Eso era lo que más me molestaba de ella. ¿Será porque nadie antes había estado en contra mío? Excepto mi padre, él nunca me defendía, siempre pensó diferente a mí. Igualmente yo nunca me defendí, es que le tengo algo de miedo.
-Hijo ¿Estás acá?-
-Si ma, ya voy- Me levanté y fui para la cocina. -¿Qué pasa?-
-Tu hermano tiene un noticia para vos.- No tenía ni idea de qué se trataba.
-El doctor dijo que... que estoy mejorando y que estoy respondiendo bien a los tratamientos.- Me sonrío. La felicidad vino hacia mí.
-¡Eso es genial, enano! Estoy muy feliz- Saber que mi hermanito se estaba mejorando era una gran noticia. Lo quería demasiado y me gustaría estar cien veces más yo en su lugar antes de que esté él, pero la vida no quiso que fuera así. Estuvimos todo el día jugando a la play hasta que se quedó dormido y yo lo seguí.
  Al día siguiente, entró el director al aula a presentarnos a nuestros dos nuevos compañeros. Había escuchado sobre eso, pero no le dí mucha importancia. Entraron al aula y a uno lo conocía, era...
"Empezar de cero aveces es una opción."

sábado, 18 de enero de 2014

Harry Potter y las Reliquias de la Muerte

Harry Potter y las Reliquias de la Muerte de J. K. Rowling fue el segundo libro que leí de esta saga. Ya me había quedado fascinada con Harry Potter y el Misterio del Príncipe, así que estaba muy ansiosa por leer este, también porque las películas, parte 1 y parte 2, no habían salido y era emocionante saber el final de esta gran historia antes de que salgan las películas.

Comencé a leerlo y para mi sorpresa, con cada capítulo que pasaba, me sorprendía. Es un libro en el que tenes acción, intriga, ansiedad, desesperación en cada uno de sus capítulos. Leía un capítulo y se ponía mejor que el anterior, leía otro y era aún mejor y así sucesivamente. Además mi imaginación volaba, era como ver todo desde adentro del libro, desde adentro de la película y no podía parar de leer porque terminaba un capítulo y quería más y más.

En donde más me sorprendí e hizo que amara aún más esta historia fue en los últimos capítulos. Me quedé con la boca abierta cuando descubrí todo lo que leía, esa historia rebuscada que pensó Rowling, que por cierto supo el final de la saga antes de empezar a escribir los libros, era algo que no me lo imaginaba. Pensé muchas veces en cómo podría llegar a terminar, muchísimas, y en ninguna de ellas acerté. Y para todo el mundo, lo mejor es tener un final inesperado, en donde te sorprenda al cien por cien, y eso era lo que había hecho Rowling.

Cuando terminé de leerlo le decía a todo el mundo: "No sabes como termina Harry Potter, no te lo esperas pero ni ahí" Tenía esas ganas de contarle a todos como terminaba, era como un gran secreto que no me lo podía guardar. Aunque me preguntaran como era que terminaba, yo no se los contaba porque me gustaba que las demás personas se mueran de la intriga y yo no porque ya sabía todo; era divertido.

Para mí, Harry Potter y las Reliquias de la muerte, es uno de los mejores libros que he leído. Simplemente excelente.

Sinopsis:

Harry pasa los últimos días del verano en Privet Drive, aunque este año nada será como antes. Se acerca una fecha crucial, su decimoséptimo cumpleaños, que marcará el fin del encantamiento protector que lo mantiene a salvo. El anunciado enfrentamiento a muerte con lord Voldemort es inminente y el futuro se presenta más lleno de peligros y amenazas que nunca... Ha llegado la hora final, el momento de tomar las decisiones más importantes, y Harry debe reflexionar y concentrar todas sus fuerzas para cumplir con éxito la difícil tarea que le ha sido encomendada. Afortunadamente no está solo, y con la incondicional ayuda de Ron y Hermione, y de tantos otros de sus fieles amigos, Harry se lanza a una vertiginosa carrera en la que demostrará que sabe lo que está en juego y que no teme a su destino.


Que tengan un buen día muggles!
"La tercera no es la vencida, la vencida es hasta que el corazón ya no pueda mas."

viernes, 17 de enero de 2014

Stole My Heart: Capítulo 3.



Capítulo 3 

Narra Zendaya

  Cuando la profesora dijo Lember y luego me nombró a mí, no sabía quien era Lember. Entonces, empece a mirar para todos lados para ver quien era y, por mala suerte, me encuentro con la mirada que no quería encontrarme. Me quedé viéndolo unos segundos, me miró a los ojos y sonrío. No podía apartar mi mirada de esos grandes ojos de un color indefinido, una mezcla entre verde y azul (¿Un verde-azulado? Vamos a llamarlo así)que me hipnotizaban. Aparté la mirada de él al ver que todos copiaban lo que la profesora escribía en el pizarrón. ¿Por qué me tenía qué tocar él? ¿Por qué no era otro chico? ¿Por qué cuando me mira a los ojos no puedo apartar mi vista? ¿Por qué? Eso era lo que me preguntaba y ninguna de aquellas preguntas tenían respuesta. El sonido molesto de la campana me sacó de mis pensamientos, me levanté para salir al recreo cuando alguien se interpuso en mi camino.
-Que suerte que tenes.- Me dijo un chico bastante alto, era lindo.
-¿Por qué tengo suerte?- Otra pregunta más para mi lista, aunque esta si tenía respuesta.
-Porque te toco hacer el trabajo con Franco.- ¿En serio me lo decía?
-Créeme, es con el que menos quería hacer el trabajo.- Además porque no me lo banco y seguro voy a tener que hacer el trabajo yo sola porque es un vago, pensé.
-No me mires así, es el mejor de la clase y todos los trabajos los hace él solo, aunque sean de a dos.- Primero, no podía creer lo que escuchaba, y segundo, me cerró la boca. -Te llamas Zendaya ¿No?- Cambió el tema totalmente.
-Si ¿Vos?- Pregunté al recordar que no sabía ni siquiera quien era.
-Soy Manu, mucho gusto.- Dijo estirando su mano para que yo estreche la mía, eso hice. -Me parece que vamos a hacer muy buenos amigos vos y yo ¿No te parece?- No sabía que contestarle. -Bueno al parecer sos de pocas palabras.- Era un momento incómodo, sólo lo miraba callada. -Perdón yo te interrumpí con todo esto y poray querías ir con las chicas.-
-No, está bien. No me pidas perdón.-
-Bueno, te acompaño, yo también soy parte del grupo.- Empezamos a caminar hacia donde estaban las chicas.
-¿A dónde estaban?- Preguntó Nicole.
-Por ahí- Respondió Manu. Las chicas empezaron a hablar de que iban a entrar dos chicos nuevos a nuestro curso.
-¿Serán dos chicos?-
-No sé ¿Pero en qué curso van a ir?-
-Y al nuestro porque en el "A" ya está lleno y a nosotros nos sobra lugar.- Mientras seguían hablando sentía que alguien me clavaba la mirada. Giro mi cabeza para ver quien era, Manu. Me incomodó bastante que me viera así, pero traté de evitarlo.
-Manu ¿Por qué estás mirando tan fijamente a Zendaya?- Él se hizo el tonto.
-¿Qué? Yo no la estoy mirando, solo tenía un mosquito en el hombro- Al parecer nadie le creyó, menos yo. Si hubiera tenido un mosquito lo hubiera matado, eso creo.
-Hola ¿Estás?- Manu movía su mano de arriba a bajo delante de mi cara.
-¿Qué pasa Manu?-
-Ya tocó el timbre, tenemos que ir al aula- Miré a mi alrededor y no había nadie. -Vamos.- Dijo y empezamos a caminar y apoyó su brazo sobre mis hombros.
  La mañana pasó bastante rápido, estaba esperando al colectivo cuando veo acercarse a Franco. Desvié la mirada, ya que no quería dirigirle la palabra, pero eso no funcionó.
-Cuatro ojos, tenemos que hablar...-
"Pones canciones tristes para sentirte mejor." -Adiós, Gustavo Cerati.

La vida no se detiene por nadie.

  "La vida no se detiene por nadie" una frase en la que podes encontrarla en cualquier parte, pero yo la leí en un bonito libro llamado Las Ventajas de ser Invisible. Es ese tipo de historias en las que se enfocan en los adolescentes, común, casi idénticas a las demás. Pero para mi especial. No se si es porque en algunos casos me sentí identificada con el personaje principal o si realmente aprecio el mensaje que me dejó. Creo que es más probable la segunda que la primera. 
  Esa frase es la que más me llamó la atención, si bien el libro demuestra el significado, yo no terminé de comprenderlo hasta que fui a la Feria de Diseño, que tenía que viajar desde mi casa hasta Palermo en tren, y observé diferentes situaciones. Desde la persona que corría al tren para alcanzarlo pero no pudo hacerlo, personas precarias pidiendo o vendiendo en diferentes lugares en la ciudad o hasta personas de un nivel social mejor pero que sin embargo se notaba una amargura en sus rostros. Pero lo que realmente me dio el "click" para entender aquella frase que rondaba en mi cabeza, fue el momento en el que el tren, parado en una estación, no iniciaba nuevamente su marcha. La mayoría de los pasajeros se preguntaba que estaría pasando y a los pocos segundos llegó la respuesta. Una mujer, desesperada, gritaba mientras pedía ayuda y decía que le habían robado. Pude observar que llevaba un bebé en sus brazos y junto a ella se encontraba otra mujer. Después de escucharse algún que otro grito mas y un barullo entre la gente, el tren volvió a arrancar dejando a la mujer, con su hijo entre brazos y a su acompañante en el andén.
  No hace falta solamente ejemplos de situaciones malas o tristes para entenderla, también hay situaciones felices, en las que uno desea detener el tiempo en ese preciso momento que todo parece perfecto, pero no, la vida no se detiene por nadie.