La lectura, Peter Pan y yo

Una de las cosas que más disfruto hacer es leer. Y el primer libro que leí, que me dí cuenta gracias a él que me gustaba leer, fue Peter Pan. Mi cuento infantil favorito; nada de princesas, yo amaba Peter Pan (y lo sigo amando). Desde chica me fasinó la historia de un chico que nunca crece, que tiene aventuras y se divierte la mayor parte del tiempo, sobre todo, podía volar. Yo quería ser ese chico y creo que era una de las pocas niñas que no quería ser grande, nunca quise crecer ni ahora lo quiero hacer; lo que es un grave problema. Podría leer el libro y ver la película cuantas veces quisiera que nunca me cansaría.

Mi papá me regaló este libro (exactamente la misma tapa que la imagen), no me acuerdo porque o para que ocación me lo dió, pero al principio lo miré con cara rara. No sabía que me gustaba leer, pero siempre estuvo presente: le leía todo el tiempo cuentos infantiles a mi primito y el me escuchaba con atención, me gustaba leer en la escuela y de vez en cuando leía algún librito que se encontraba en mi casa; pero nunca había leído un libro de más de 200 páginas. Comencé a leerlo y los primeros caítulos me aburrían, asique lo dejaba. Cuando quería leerlo comenzaba todo de nuevo, pero como los primeros capítulos que leía me aburrían lo dejaba, y así sucesivamente. Hasta que un día logré pasar esos capítulos, sin aburrirme, y seguir leyendo. Me encantó, era como tener una televisión (lo que hacía la mayoría del tiempo era mirar la televisión) dentro de tu cabeza, imaginar las cosas exactamente como vos querer y que la "película" te guste entera; nada que no te gustara.

Al leer este libro me aferré más a la historia de Peter Pan, descubrí que amaba leer y que mi imaginación era mucho más grande de lo que pensaba.

Ya todos deben conocer la historia de Peter Pan, el niño que nunca crece, y si no es así no se como has vivido hasta ahora. Una gran historia para aquellos que les gustan las aventuras y diversión.

La segunda estrella a la derecha y directo hasta el amanecer.